En la actualidad, el crecimiento exponencial de las redes sociales las ha convertido en un fenómeno global, estableciendo a los influencers como poderosas herramientas de promoción, pues, con su amplia base de seguidores, estos actores proporcionan a las empresas un acceso directo a su público objetivo, ejerciendo un impacto significativo en las decisiones de compra de los consumidores.
Por lo cual, la asociación con influencers se ha convertido en una estrategia efectiva para generar ingresos y alcanzar nuevas audiencias, presentando un sistema flexible en cuanto a presupuesto, duración y medios de transmisión.
Debido al impacto de esta nueva relación entre marcas e influencers se plantean desafíos legales que deben ser analizados minuciosamente. Pues, desde el momento en que un influenciador publica contenido, surgen implicaciones legales significativas. Por ejemplo, el uso no autorizado de marcas comerciales, materiales protegidos por derechos de autor o diseños en el contenido de los influencers puede desencadenar disputas legales en términos de propiedad intelectual.
En Colombia, el primer intento de regulación sobre influenciadores se materializó en 2020 a través de la guía de buenas prácticas en publicidad con influencers emitida por la delegatura de protección al consumidor de la Superintendencia de Industria y Comercio. La cual, establece la obligación de distinguir la publicidad comercial como tal, exigiendo a los influencers dejar de presentar mensajes publicitarios como contenido orgánico y hacer evidente la relación comercial con los consumidores. Por consiguiente, los influencers deben ejercer precaución ante las implicaciones legales al publicar contenido, dado el alcance masivo de sus plataformas y la gran responsabilidad que conlleva.
En este sentido, se ofrecen algunas recomendaciones para influencers y empresas al momento de establecer acuerdos laborales:
- Formalizar el acuerdo mediante un contrato de prestación de servicios que defina condiciones como la duración, redes sociales especificas para la publicidad, frecuencia de publicación, remuneración, responsabilidad frente a terceros, la autoría del contenido y la titularidad de los derechos de autor
- Prohibir la inclusión en el contenido de elementos para los cuales el influenciador no posea permiso, derecho o licencia, ya sea por pertenecer a terceros, falta de autorización de la marca, divulgación e información privada de terceros, suplantación de identidad, transmisión de publicidad no solicitada o promoción de actividades ilegales, así como la inclusión de contenido difamatorio o inapropiado.
- Incluir clausulas esenciales que aborden la autorización de uso de imagen, voz y nombre, límites y formatos para la explotación de la imagen del influenciador, derechos de exclusividad, explotación de propiedad intelectual de los contenidos creados y una definición precisa de los derechos de propiedad intelectual y de autor del contenido publicado, para prevenir conflictos futuros relacionados con el uso del material en redes sociales
Todos estos pasos, proporcionan un marco legal sólido para las relaciones entre influencers y marcas, garantizando la protección de los derechos y la integridad de ambas partes involucradas en estas colaboraciones
En conclusión, el marketing de influencers en la moda presenta desafíos legales cruciales, por ello, establecer acuerdos claros y éticos entre influencers y marcas es fundamental para evitar conflictos legales. El equilibrio entre creatividad y cumplimiento legal es esencial para el éxito de estas colaboraciones en el mundo del marketing digital.
REFERENCIAS
Visbal Vergara, M. (2022). Influencers: Regulación actual y nuevos retos en materia legal. https://www.asuntoslegales.com.co/consultorio/influencers-regulacion-actual-y-nuevos-retos-en-materia-legal-3367680
Ramos, R. (2023). Marketing de Influencers: ¿Qué hay que tomar en cuenta? https://lexlatin.com/reportajes-marketing-influencers-redes-sociales-consejos-campa%C3%B1as-publicidad-marcas-laboral-pi