La semana pasada tuvo lugar la emocionante final de la Liga Betplay, un enfrentamiento épico entre los clásicos rivales Millonarios y Atlético Nacional. La intensidad de este partido generó una gran emoción entre los apasionados aficionados de ambos equipos, tanto así que las alcaldías de Bogotá y Medellín expresaron su deseo de transmitir el evento en pantallas gigantes. Sin embargo, se encontraron con la negativa de Wiin Sports, quien alegaba ser el único poseedor de la licencia para transmitir los derechos de la liga. Además, advirtieron que tomarían medidas legales si se intentaba retransmitir el evento en lugares públicos. Tras algunas negociaciones, finalmente se llegó a un acuerdo satisfactorio.

No obstante, esta situación provocó una discusión acerca de si Win Sports debería haber accedido a la solicitud y permitir la retransmisión del evento. Para comprender mejor el meollo del asunto, es importante aclarar qué son los derechos de radiodifusión.

Los derechos de radiodifusión se refieren a un conjunto de derechos legales que protegen las emisiones de radio y televisión realizadas por los organismos de radiodifusión. Estos derechos les otorgan a los organismos ciertos derechos exclusivos sobre sus emisiones y les permiten controlar y gestionar su uso por parte de terceros. Algunos de estos derechos incluyen el derecho de reproducción, el derecho de distribución y el derecho de comunicación al público.

En este contexto, es relevante mencionar que la Dimayor, como titular de los derechos de transmisión del fútbol profesional colombiano, otorgó la exclusividad a Win Sports S.A.S. a partir de 2012 mediante un acuerdo. Por este acuerdo, Win Sports es la única empresa autorizada para la producción, registro, grabación, captura, edición, difusión, emisión, comunicación, distribución y puesta a disposición de la señal audiovisual de estos eventos deportivos. A cambio, la Dimayor recibe una suma anual de US$35 millones por los derechos de transmisión.

Si bien la negativa de Wiin Sports fue objeto de críticas por parte de algunas personas, es importante reconocer que en realidad están protegiendo un derecho legítimo,y sobretodo una inversión. Como lo expresó el presidente de la Dimayor, Fernando Jaramillo, durante una entrevista en Blue Radio, "Es como si alguien comprara una entrada de cine y luego alguien transmitiera la misma película de forma gratuita fuera del cine". Esta analogía pone de manifiesto cómo la transmisión no autorizada de los derechos de radiodifusión afectaría los derechos legítimos y los acuerdos establecidos.